Voluntad Divina

Cuando se inventó el pararrayos, la Iglesia se negó a proveerse de uno porque consideraba que los rayos eran voluntad divina. Cuando comprobaron que los rayos sólo dañaban a las iglesias y no al resto de las edificaciones provistas de pararrayos, se retractaron. Si Dios existe, sin duda es un cachondo.

[Encontrado por Fran en Genciencia]

3 comentarios:

Alex dijo...

Buenísimo, jajajajaja.

Fran dijo...

Pues si, es buena la frasecita jejeje ¿Por qué cosas así no hacen reflexionar a según qué personas?

kadeworld dijo...

Me ha encantado jajaja